Con profunda tristeza, desde la APDI queremos comunicar el fallecimiento de nuestro querido Socio de Honor y amigo Víctor Palacio. Su partida deja un gran vacío en la comunidad global de diseñadores de iluminación, pero también un valioso legado que seguirá iluminando el camino de quienes compartimos su pasión por el diseño de iluminación. Víctor fue mucho más que un destacado profesional en nuestra disciplina, pues su talento, visión y dedicación trascendieron los proyectos en los que trabajó, convirtiéndolo en un referente indiscutible para todos aquellos que hemos encontrado en la iluminación una forma de mejorar los espacios y la vida de las personas. Su compromiso con la excelencia y su incansable curiosidad por innovar han provocado aportaciones significativas al desarrollo de nuestra profesión, influyendo en generaciones de diseñadores de todo el mundo y dejando una huella profunda en el sector.
Más allá de su trayectoria profesional, quienes tuvimos el privilegio de conocerlo de cerca sabemos que Víctor era una persona generosa, cercana y siempre dispuesta a compartir su conocimiento. Su calidez humana, su entusiasmo por el aprendizaje y su capacidad de inspirar a los demás lo convirtieron en un gran mentor y en un amigo entrañable para muchos diseñadores y diseñadoras. Hoy, su ausencia nos llena de tristeza, pero también de gratitud por todo lo que nos dejó, pues su legado vivirá en cada proyecto en el que participó, en cada conversación en la que compartió su sabiduría y en cada persona a la que ayudó a crecer profesional y personalmente.
Desde la APDI enviamos nuestras más sinceras condolencias a su familia, amigos y colegas en este difícil momento. Nos unimos en su recuerdo y en la certeza de que su luz seguirá brillando en cada rincón de nuestra comunidad.
Descansa en paz, querido Víctor.